viernes, 22 de noviembre de 2013

Preparándome para no ser “el viejito”.


A muchas personas, dependiendo de dónde vivan, la palabra viejito tiene un significado no tan positivo como muchos quisieran, algunos imaginan a una persona sentada en un sofá, llena de cobertores y con los ojos entre abiertos, otros imaginan a una persona encorvada con bastón y anteojos.
Para muchos el ser “viejito” es sinónimo de ser menos capaz de hacer algo, quizá sabio, quizá feliz, pero con debilidades funcionales, con mala salud. Algunas otras personas le dan un significado positivo a la palabra “viejito” pero, la mayoría nos ha hecho saber y notar que “ser viejito” no es algo que quieran ser. Ser mayores, ser sabios, ser activos, ser felices, eso sí.
¿Entonces como nos preparamos para no ser “el viejito”?
Prepararnos para envejecer sanamente, o exitosamente como muchos dicen, no es tarea fácil y de hecho es algo en lo que no pensamos hasta que nos acercamos a la 3a etapa de la vida, no pensamos en eso cuando tenemos 13 años, y cuando estamos en la preparatoria comiendo “maruchans” y papitas con salsa picante ni nos pasa por la cabeza eso de prepararnos para no ser “el viejito”…
Cuándo somos jóvenes se nos olvida que sí tenemos suerte podremos llegar a “viejos”, se nos olvida y empezamos con excesos, con bebidas, con desveladas y no hacemos caso a la gente “mayor” que nos dice: “no te desveles por que luego estas desveladas te van a pasar la factura”… sobre todo de estudiantes universitarios nos develamos, haciendo tareas, proyectos o en las fiestas.
Es curioso que nunca nos demos cuenta de que lo que sembramos lo cosechamos,hasta que estamos mayores. Después de ya unos años, el cuerpo empieza a reclamar lo que le hicimos y queremos enderezar el camino, pero ¡ah como es difícil!…
La mejor manera de prepararnos para envejecer de una manera activa y sana es siendo conscientes de que  no seremos jóvenes eternamente y que cada etapa de la vida es fugaz. Si desde pequeños aprendiéramos  a vivir de una manera más sana y activa, otra historia sería.
Al ser conscientes de lo que nos espera, cambios fisiológicos , cambios emocionales y culturales entonces podemos hacer algo, podemos empezar por cuidar lo que comemos, hidratar nuestro cuerpo, ingerir proteínas de calidad y sencillamente comer bien. Además debemos de saber que el ejercicio es algo que se debe de  hacer por gusto, que podemos disfrutarlo, buscar una actividad que  nos encante y nos proporcione beneficios, de nada sirve decir que jugamos fútbol y luego nos tomamos unas cervezas… ¿cierto?
Y sobre todo ser felices, quitar amarguras, quitar rencores y sonreirle a la vida, por que lo que nos va a convertir en “el viejito” o “la viejita” cascarrabias es la falta de inteligencia emocional.
¿Ustedes que opinan?
¿Cómo evitan ser “el viejito” inactivo y cascarrabias?

No hay comentarios:

Publicar un comentario