Pasa el calor, las fiestas de Septiembre, los veraneantes regresan a su otra residencia y el espacio que ellos dejan parece que lo ocupa el frio y las lluvias, incluso algunos se creen que los pueblos se vacían, pero no es asi, siempre hay habitantes que reinvindican su derecho a seguir adelante. Este es el escenario de casi todos los pueblos de 100 a 300 habitantes, seguro que muchos más, pero en esas cifras se mueve el nuestro, en el que compartimos los días.
Por eso hacemos otras actividades, más entrañables, para menos personas y con el mismo animo. En esa actitud ayer celebramos un "Conxuro", que nos prepare para los fríos sin abandonar el humor. El próximo mes otra actividad cualquiera, y el siguiente y más, que esto no se vacía, solamente hay más sitio.
Tenía muy buena pinta la cosa,seguro Fran que lo habeis pasado de maravilla.
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