El Norte de Castilla ayer, 21 de agosto de 2012
La Federación de Jubilados estudia el copago en sus actividades tras el despido de 300 trabajadores
Planteará una tarifa única acordada con Junta, diputaciones y municipios de más de 20.000 habitantes.
El recorte en las distintas líneas de subvenciones de la Confederación de Jubilados y Pensionistas de Castilla y León ha obligado a este colectivo a suspender drásticamente las actividades que viene prestando a los mayores, tras verse en la necesidad de llevar a cabo un gran recorte en su plantilla. Situación de la que las asociaciones podrían intentar salir instaurando el copago para algunas de las líneas de servicio de mayor calado social.
El presidente de la Confederación regional, Marcial Fuentes, confirmó que con fecha del pasado 1 de agosto se han hecho efectivos los despidos de 300 monitores y alrededor de 20 administrativos que venían desempeñando su trabajo en las distintas sedes del colectivo.
«Nos obligaron casi a despedirlos de un día para otro y ha sido un trago muy difícil, porque muchas personas llevaban con nosotros quince años o más», explicó Marcial Fuentes, quien señaló que «de momento hemos podido mantener las sedes abiertas y poco más».
Por este motivo, la confederación regional de jubilados está estudiando plantear a las administraciones la posibilidad del copago, de manera que los usuarios de algunos de los servicios más demandados aportaran mediante una tarifa parte del coste del servicio.
«Queremos valorar bien esta posibilidad y plantearla de la mano de las entidades con las que colaboramos, fundamentalmente la Junta de Castilla y León, las diputaciones y los municipios de más de 20.000 habitantes», explicó Fuentes, quien sin embargo anticipó que de salir adelante esta medida «todos los jubilados y pensionistas de la comunidad pagarán la misma tarifa, con independencia de si viven en la ciudad, en un pueblo grande o en uno pequeño».
El copago parece según el presidente la única posibilidad para mantener líneas como el programa de refuerzo de la memoria o las sesiones de gimnasia de envejecimiento activo. «Son programas muy importantes, básicos para los mayores y que si no los prestamos nosotros es difícil que lleguen a determinados lugares", explicó el presidente.
Igualmente, Marcial Fuentes defendió que «sabemos que a los mayores que llevamos estos programas de gimnasia les resulta muy positivo para su calidad de vida y que además dejan de ir todos los días al médico para que les recete medicamentos».
La Confederación de Jubilados y Pensionistas agrupa en Castilla y León a cerca de 1.400 asociaciones que aglutinan a más de 500.000 personas. Cuenta con un presupuesto anual de alrededor de 2 millones de euros, que podría verse recortado el año que viene en más de un 80%.
El recorte en las distintas líneas de subvenciones de la Confederación de Jubilados y Pensionistas de Castilla y León ha obligado a este colectivo a suspender drásticamente las actividades que viene prestando a los mayores, tras verse en la necesidad de llevar a cabo un gran recorte en su plantilla. Situación de la que las asociaciones podrían intentar salir instaurando el copago para algunas de las líneas de servicio de mayor calado social.
El presidente de la Confederación regional, Marcial Fuentes, confirmó que con fecha del pasado 1 de agosto se han hecho efectivos los despidos de 300 monitores y alrededor de 20 administrativos que venían desempeñando su trabajo en las distintas sedes del colectivo.
«Nos obligaron casi a despedirlos de un día para otro y ha sido un trago muy difícil, porque muchas personas llevaban con nosotros quince años o más», explicó Marcial Fuentes, quien señaló que «de momento hemos podido mantener las sedes abiertas y poco más».
Por este motivo, la confederación regional de jubilados está estudiando plantear a las administraciones la posibilidad del copago, de manera que los usuarios de algunos de los servicios más demandados aportaran mediante una tarifa parte del coste del servicio.
«Queremos valorar bien esta posibilidad y plantearla de la mano de las entidades con las que colaboramos, fundamentalmente la Junta de Castilla y León, las diputaciones y los municipios de más de 20.000 habitantes», explicó Fuentes, quien sin embargo anticipó que de salir adelante esta medida «todos los jubilados y pensionistas de la comunidad pagarán la misma tarifa, con independencia de si viven en la ciudad, en un pueblo grande o en uno pequeño».
El copago parece según el presidente la única posibilidad para mantener líneas como el programa de refuerzo de la memoria o las sesiones de gimnasia de envejecimiento activo. «Son programas muy importantes, básicos para los mayores y que si no los prestamos nosotros es difícil que lleguen a determinados lugares", explicó el presidente.
Igualmente, Marcial Fuentes defendió que «sabemos que a los mayores que llevamos estos programas de gimnasia les resulta muy positivo para su calidad de vida y que además dejan de ir todos los días al médico para que les recete medicamentos».
La Confederación de Jubilados y Pensionistas agrupa en Castilla y León a cerca de 1.400 asociaciones que aglutinan a más de 500.000 personas. Cuenta con un presupuesto anual de alrededor de 2 millones de euros, que podría verse recortado el año que viene en más de un 80%.
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